Al momento de enfrentarnos ante la oportunidad de emprender surgen múltiples interrogantes que pueden conducirnos a dos decisiones: detenernos o avanzar. Si bien, son numerosas las fuentes que nos hablan de la importancia y la oportunidad hoy más que nunca de iniciar un proceso de planeación de negocio, preguntas como ¿qué hacer?, ¿por dónde empezar?, ¿cuánto invertir?, ¿en qué momento comenzar?, nos llevan a replantear en más de una ocasión una decisión de vida como lo es el emprendimiento. Si bien miles se han lanzado a esta aventura, es necesario mencionar que otros cientos de miles han optado por no hacerlo, y es allí donde el desarrollo de un ecosistema alrededor de los emprendedores resulta útil y necesario para mejorar dicha dinámica de toma de decisiones. La mentoría y la consultoría resultan entonces fundamentales en el acompañamiento de este proceso.
La creación de empresa por definición es una ciencia que enmarca numerosas disciplinas del saber, pero también del hacer. En este sentido, podemos acotar que estos últimos son dos pilares imprescindibles en la generación de empresa de manera rentable y sostenible. El saber, nos permitirá contar con una “caja de herramientas” adecuada a las diferentes situaciones y realidades con las que nos enfrentemos, pero el hacer, resulta el complemento que puntualiza cómo utilizar dichas herramientas de manera ágil y dinámica acorde al contexto del entorno real. Las estadísticas hacen referencia a que sólo el 20% de los nuevos emprendimientos superan los primeros tres años de operación. Esta realidad, nos permite entrever las grandes brechas que existen en el ecosistema de emprendedores a nivel nacional en Colombia, lo cual, también refleja grandes ventanas de oportunidad. Es común encontrar equipos de personas muy valientes que hacen frente a cientos de decisiones cada día con las cuales determinan el devenir de su emprendimiento, sin embargo, no todas desembocan en los resultados esperados. La mentoría y la consultoría empresarial, entendida como fuente de aquellos dos pilares referidos anteriormente (saber y hacer), tienen uno de los mayores retos hoy por hoy, siendo llamados a ser vehículos del desarrollo y crecimiento de lo que es entendido como la base de la economía colombiana, el desarrollo empresarial, la productividad y la innovación.